A lo largo de los últimos años se han venido realizando tareas de mantenimiento y acondicionamiento en el Autódromo de Terramar, encaminadas a preservar el espacio en su totalidad. Entre los trabajos realizados cabe destacar las tareas de limpieza de la vegetación, tanto en las explanadas del interior del circuito como en la misma pista, que la hacían casi inaccesible en ciertos tramos.
De igual modo, los socavones de las rectas, fueron rellenados por cuestiones de seguridad. Con el objetivo de mantener la salubridad del recinto, se retiró toda la uralita de los antiguos gallineros y de la grada, presente desde los años 1960, cuando el Autódromo de Terramar era una explotación avícola.
Hace ya varios meses se procedió a impermeabilizar la grada para evitar las filtraciones de agua, devolviéndola a su estado original y reparando el hormigón, dañado en algunas partes. ¡Fijaros en el cambio!